Aun con el amplio margen de victoria que logró Manolo Jiménez Salinas —56.9% de sufragios—, candidato del PRI, PAN y PRD a la gubernatura de Coahuila, Ricardo Mejía Berdeja, quien fue abanderado del PT —13.3%—, afirmó que impugnará la elección del pasado 4 de junio, al asegurar que se incurrió en irregularidades como la compra de votos.
Evento con simpatizantes del denominado “Movimiento Coahuilense” en Torreón, el exsubsecretario de seguridad federal abundó que además hubo entrega de despensas, intimidación y la amenaza a trabajadores del Estado “a quienes pidieron fotos de sus votos con el gafete al lado de la boleta, les dieron una clave… por eso amigas y amigos, vamos a impugnar la elección, vamos a impugnar la elección porque no podemos dejar esto como si nada pasó”, recalcó.
Mejía Berdeja precisó que el grupo de abogados con que cuenta presentará el reclamo en el transcurso de los cuatro días que la ley prevé “yo digo que cuando menos 300 mil votos que tiene hoy el PRI no corresponden a la realidad” y recordó que tendrá equipos que monitoreen la labor estatal en aspectos que prometió mejorar en su campaña, como el agua, la salud, y el campo.
Menciono que el día de la votación se sufrió persecución por parte de elementos de la Policía Estatal contra representantes de su candidatura, “y también llamadas intimidatorias y patrullas afuera de oficinas”.
Con gritos de “La lucha sigue”, “no estás solo”, “Coahuila no se vende, Coahuila se defiende”, y “Ricardo Mejía, Coahuila en ti confía”, el grupo de afines a su propuesta le reiteraron su respaldo en el pasado domingo.
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